Me diagnosticaron VPH, ¿y ahora qué?

Me diagnosticaron VPH, ¿y ahora qué?

Vamos a hablar sobre el Virus de Papiloma Humano (VPH) y cuáles son los tratamientos disponibles y más comunes que existen en la actualidad.
Hay dos cosas que tenemos que aclarar antes de comenzar:

1) Antes de que el médico te indique un tratamiento es necesario tener un diagnóstico.

2) La única persona que te puede diagnosticar e indicar un tratamiento es un médico.

¡Infórmate y siempre visita a tu médico!

Digamos que te encontraste una verruguita y fuiste al doctor. O cuando regresaron los resultados de tus pruebas de rutina, como el Papanicolaou, algo salió un poco diferente a lo esperado. En cualquiera de los dos casos…

Te diagnosticaron una infección por VPH. ¿Qué pasa ahora?

Antes de elegir un tratamiento lo ideal sería que tu médico te hiciera estudios para saber cuál tipo de VPH te infectó, ya que puede ser uno o pueden ser varios al mismo tiempo. Existen más de 150 tipos diferentes del virus que pueden infectar humanos, pero solo un grupo pequeño de alrededor de 15 tipos son los causantes de casi todos los problemas de salud que asociamos con el virus.

Además del tipo será importante conocer la ubicación de todas las verrugas; y en el caso de lesiones, será necesario saber la localización, la extensión y los bordes para definir cuál es el mejor tratamiento para una persona.

Imagina que tú juegas fútbol en pasto y tienes una amiga que juega básquetbol en duela. Las dos sufren una caída durante el partido y caen sobre la rodilla, pero sus lesiones son muy diferentes. Tal vez tú te raspaste la pierna mientras que tu amiga se hizo un moretón. Ambas están lastimadas debido a una caída pero sus tratamientos y procesos de recuperación serán distintos. Algo muy parecido pasa con el VPH.

Es posible que una persona tenga verrugas y le receten una crema que rápidamente las elimine, pero a otros no les funcione. O que una mujer tenga una lesión del mismo grado que otra, pero los tipos de VPH presentes y la extensión de la lesión sean distintos.

Entonces, los tratamientos pueden ser radicalmente diferentes. Por eso es importante no comparar tus resultados con los de otros pacientes, sino acudir a un especialista que pueda ofrecerte un tratamiento personalizado y adecuado para tu caso. Cada caso será único.

Una vez que te han diagnosticado con VPH, en el caso de las verrugas genitales, los tratamientos más comunes incluyen: 

  1. Esperar a que desaparezcan solas. En muchos casos el sistema inmunológico combatirá la infección y las verrugas desaparecerán por sí solas. Sin necesidad de ningún tratamiento.
  2. Aplicar tratamientos químicos. Consiste en la aplicación de productos químicos en la zona infectada, siempre bajo supervisión de un profesional. Es un tratamiento que se aplica periódicamente.
  3. Uso de cremas de aplicación personal. Existen cremas con distintos mecanismos de acción que puedes aplicar en tu casa durante varios días o semanas, de acuerdo a las indicaciones de tu médico. La selección de la crema dependerá de la localización de las verrugas y el estado general de salud del paciente.
  4. Métodos quirúrgicos. En algunos casos será necesario eliminar verrugas grandes o extendidas, o que no han respondido a otros tratamientos y eso se hace mediante métodos de congelamiento, cauterización o corte de las verrugas.

Por otra parte, a diferencia de las verrugas, todos los tratamientos para las lesiones tienen que ser realizados por profesionistas. Los tratamientos son:

  1. Esperar y dar seguimiento. En algunas etapas muy tempranas de la infección, es posible detectar inflamación o lesiones muy pequeñas y poco extendidas, por lo que se decide no dar ningún tratamiento ya que es posible que se reviertan de forma natural. Si este es tu caso, es indispensable que asistas puntual a tus citas de seguimiento para saber si la lesión se revirtió o avanzó y necesitas un tratamiento distinto.
  2. Métodos quirúrgicos. Si la lesión se ha extendido o es de un grado más alto, entonces será necesario extirparla. Existen diferentes métodos, pero los más comunes son la escisión electroquirúrgica con asa, la crioterapia y la conización por criocirugía. Todos estas son cirugías ambulatorias.

¿Te preguntas cómo vivir con VPH?

En conclusión, la mayoría de las infecciones, ya sean verrugas o lesiones, requerirán atención y seguimiento. Pero, hay que resaltar que debemos evitar los tratamientos innecesarios. El exceso de tratamientos o pruebas no solo conlleva costos adicionales (para el paciente y para todo el sistema de salud), sino que puede tener efectos adversos en la salud, incluyendo ansiedad, dolores, sangrado vaginal e incluso afectar la fertilidad a largo plazo.

Lo más importante es que sepas que si te han diagnosticado una infección por VPH, existen diversas formas de darle tratamiento y prevenir el desarrollo de lesiones graves o cáncer. Si te vacunas, realizas tus pruebas preventivas en tiempo y sigues las indicaciones de tu médico, podrás mantener una vida sexual activa, saludable y plena.

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Sobre la autora: Paty Rodil es biotecnóloga, maestra en Biología Molecular, y actualmente estudia el doctorado en el IPICYT en la búsqueda de marcadores moleculares para prevenir enfermedades. Durante varios años trabajó en investigación, diagnóstico y acompañamiento de pacientes con VPH, desde entonces ha dado más de 2,100 asesorías sobre el tema. Es voluntaria en Allbiotech y Científicas Mexicanas.